A escasas horas de la clausura de la edición 2018 del Festival Internacional de Cine de Panamá, platicamos con su directora Pituka Ortega sobre el festival, pero más allá de las películas. De alguna de las acertadas iniciativas que se vienen tomando año tras año y que no son tan conocidas en el exterior, de objetivos primigenios que a pesar del crecimiento y la buena reputación de la goza el IFF Panamá, nunca han salido de la cabeza de los organizadores; y también de un grato anuncio que se tiene para la octava edición del IFF Panamá que sucederá del 4 al 10 de abril del 2019.
Hasta el momento, el festival está funcionando según lo planeado.
Sí, nos toma un año organizar esto, le metemos mucha fuerza desde muchos meses previos para esta semana y los resultados se perciben, se notan. Aunque siempre existe ese miedo a que las cosas fallen, y sí suele pasar, no lo creas. Pero si tienes las bases y el mejor equipo del mundo, todo lo resuelve y avanza.
¿Qué sentimientos respecto a esta participación abultada del cine panameño, cuatro películas proyectadas y una más en Primera Mirada?
Claro, y una más producida por una panameña que es Días de Luz. Esto es testimonio de lo que viene ocurriendo, del empuje del cine panameño. Hay películas que son del Fondo Cine, y otras que no lo son. Eso te indica, uno, el impacto que ha tenido el Fondo y dos, la necesidad y la capacidad por sacar estas obras adelante.
He presenciado una fuerza increíble del documental panameño en esta edición. ¿A qué creas que se deba?
El documental es siempre lo primero que tú vas a abordar. Tu sabes perfectamente bien que no hay género fácil, el documental no es fácil pero en términos de producción te da un poco más de flexibilidad. Creo que hay una necesidad tan profunda de expresar, de contar nuestras historias, de auto representarnos de la pantalla, que el documental resulta ser inicialmente el género más importante para cualquier país. Pero, tienes razón, de los ocho, seis son documentales.
Y muchos de ellos, van a rescate de temas olvidados como “Paname” o “Una noche de Calypso”
Calypso es algo histórico, cultural porque es la música entrelazada con la historia, con el aspecto racial, que es un tema de actualidad. La gente piensa que por la diversidad que existe en este país aquí no hay racismo pero sí que lo hay.
Eso es algo que se percibe incluso en el aspecto gastronómico, como en “T’ach”
Exacto, en ese trabajo hay mucho de eso.
Todos los que documentales panameños que he podido ver tienen una cercanía con la audiencia, son accesibles de ver, amables en su propuesta narrativa
Creo que el espíritu panameño se manifiesta en la mayoría de los trabajos que hay en el festival. Todos tienen un espíritu de apertura, de inclusión. Una humildad que es un factor muy importante al momento de hacer cine.
Hay otro detalle común que he observado. Todos los realizadores panameños están felices de poder arrancar, de mostrar sus trabajos en este festival
Para nosotros es realmente gratificante, porque nadie es profeta en su propia tierra. Entonces que para ellos el festival sea una plataforma importante y que lo consideren así para sus carreras, pues para eso estamos; para guiarlos en las distintas etapas de producción.
Como Primera Mirada…
Claro que sí, y vemos frutos que se están dando a raíz de su participación en el festival. Además de las conexiones que pueden lograr, también está la oportunidad de poder ver otro tipo de cine.
Además de la curadoría estupenda de Diana Sánchez, me interesa la tarea de formación de público que se sigue dando año a año, como son las funciones especiales para niños
Llevamos cuatro o cinco años de estar haciendo esto y todo empieza con ellos. Los trabajos que traemos son distintos a las propuestas infantiles que ofrece la cartelera comercial. Hay dos puntos importantísimos, uno, que tengan acceso a este otro cine, animado o juvenil. Y segundo, que sean parte de un festival de cine. Que entiendan que hay algo especial, que ocurre para ellos. Que existe una alternativa, otra opción. Que más adelante, escojan buscar este cine o no, es su decisión; pero por lo menos han tenido la oportunidad de saber. Lo horrible es no saber que algo más existe.
Considero que el IFF Panamá en pocos años se ha consolidado como el mejor festival de la región, de Centroamérica. Es un gran escaparate para nuevos directores con Primera Mirada, en el que también se incluye al Caribe. Pero hay iniciativas, que lo diferencian, que marcan esta edición por lo menos, como lo fue la Alfombra verde, aquella sección que buscar concientizar al espectador acerca de temas medioambientales
Es la primera vez que tenemos un segmento así. Una sección como tal y fue curada por el Ministerio de Ambiente que un ente nuevo dentro del engranaje estatal. Esto es importantísimo, porque el 40% de la tierra panameña son reservas naturales o son manejadas por grupos originarios. En un país de este tamaño, un porcentaje así es algo muy significativo para nosotros. Y esas son aspectos de Panamá que no se conocen.
Como las cifras drásticas que se dieron a conocer en la inauguración sobre el consumo excesivo de agua. Y eso lo cito, porque otras de las tareas que el cine puede tener, es el de ser un instrumento de concientización del espectador sobre delicados temas de actualidad. El cine no tiene que ser puro escapismo.
Ciertamente el cine latinoamericano tiende a no ser escapista, ello viene de esa necesidad de contar nuestras historias. De decir aquí estoy, donde estoy y como estoy. De no venderte un sueño que no existe.
Me gustaría a saber en qué etapa se encuentra el festival apelando a tu visión como directora
Desde un principio, teníamos, lo tenemos y creo, seguiremos teniendo el deseo de ser un festival que aporta a la difusión del cine de América Latina y que impulsa al desarrollo del cine a Centroamérica y del Caribe. Hasta este año, la gente me decía, sí pero como, que están haciendo. Pero por ejemplo el Canal IFF Panamá en Copa Airlines
Tremenda iniciativa.
Claro, estamos hablando de millones de personas que tienen posibilidad de ver esas películas. Tener un canal de un festival de cine que específicamente te diga estas no son las típicas películas que encuentras en cartelera. Y que muchísimas personas estén presionando este icono, y viendo realmente esas películas.
Cuando otras aerolíneas están retrocediendo en su oferta de películas y pocas veces se puede encontrar cine latino
Es que no pierden nada. No tienen que dejar su otra programación. Le das la posibilidad de una experiencia nueva a tu viajero. Ojalá Avianca o Latam lo hicieran. Así como tampoco es una idea patentada nuestra. Ojalá Cartagena, SANFIC o cualquier festival se decidiera a hacerlo, después se van a sorprender con la respuesta de sus pasajeros.
Recuerdo que hace seis años te pregunté sobre si tenían planes de instaurar un jurado en el IFF Panamá, y hoy nos sorprenden con la grata noticia que para la edición 2019, tendremos un jurado FIPRESCI en el festival. ¿Qué ha cambiado en el festival para que pueda tomarse esta decisión?
Creo que el festival se tenía que probar y se tenía que consolidar. Sabes que este tipo de festivales puede durar uno o dos años, y luego desaparecen. Pero este festival está tomando más y más fuerza; y se está haciendo notar. Observamos que el secretario general de la FIPRESCI estuvo encantado con la misión del festival con aquel cine incipiente, que está en un proceso de desarrollo. No se trata solo de apoyarlo, es también darle el espacio que se merece. Y estamos honrados, de contar para nuestra próxima edición con un jurado de la FIPRESCI.
Este nuevo jurado, también contribuirá en fomentar el espíritu crítico, de análisis de la obra cinematográfica en el cinéfilo local
Absolutamente, yo creo que la crítica de cine es esencial para que se fortalezca una cinematografía. Como tú sabes, los críticos no tienen tanto espacio y queremos poner nuestro grano de arena trabajando junto con FIPRESCI; porque en Centroamérica se necesitan críticos de cine porque es la única manera como los cineastas se van a robustecer, y van a ser más analíticos de su propia obra.
¿Consideras al crítico de cine como una parte del quehacer del cine? ¿Cómo un nexo con el espectador?
Siento que el trabajo del crítico es importante para el público, pero definitivamente mucho más para el cineasta. Es esencial para que un cine se fortalezca, el cine francés lo tuvo, el norteamericano también… Nosotros estamos en el momento ideal para tenerlo.
Un cine emergente que viene de países que realmente desconocía. Por ejemplo ayer, vi por primera vez, una película de Bahamas, uno de los tantos países del Caribe.
Estamos contentísimos de ser esa plataforma. Que más halago que una persona venga a IFF Panamá y después refiera diciendo que allí vio su primera película de Bahamas o Trinidad y Tobago. Y ojala que esto cambie también, que esos cines tengan más alas, pero poco a poco. Esto es lo que hacemos, por el momento.
¿Cuál es tu proyecto con el festival? ¿Qué se tiene que mejorar?
Sigo con misma idea que es la de consolidar lo que estamos haciendo hasta ahora. Hemos crecido muchísimo, queremos traer los mejores invitados que podamos traer para que puedan compartir su obra con el público panameño, que es apasionado y tan comprometido. Aquí la gente no se queda callada y a los realizadores, le llama la atención y son felices con eso. Después, entre ellos se comentan que en «Panamá algo está pasando».